Hace unos cuantos años atrás,
un futuro cliente, a quien aquí voy a llamar Juan,
se me acercó para que le ayudara a conseguir un préstamo.
Juan tenía muchas cuentas y hablaba muy poco el inglés.
Por lo tanto, tenía dificultad de encontrar un agente
de bienes raíces o una institución de préstamo
que le ayudara. Aunque yo mismo tenía mis propias
dudas en su capacidad de obtener un préstamo, decidí
ayudarlo porque me impresionó su determinación
en comprar su propia casa.
Concerté una cita para que nos reuniéramos
con una persona que tramita préstamos hipotecarios.
Esa persona se dió cuenta enseguida que Juan no tenía
en ese momento la capacidad para conseguir un préstamo,
pero se hizo de tiempo y le explicó las cosas que
debería hacer para comprar su casa en el futuro.
Le dijo que debería reducir sus gastos mensuales
y le aconsejó qué deudas debía de terminar
de pagar primero. También le dijo que refinanciara
el préstamo de su automóvil a un interés
más bajo. Luego de la conversación, pensamos
que Juan seguiría algunos de nuestros consejos pero
no estabamos muy seguros que seguiría todas nuestras
sugerencias.
Paso el tiempo, y Juan me llamaba de vez en cuando para
contarme cómo le iban las cosas. Me dijo que además
de su trabajo regular había conseguido un "part-time"
por las noches y fines de semana en un restaurante, y que
también su esposa Juanita había conseguido
trabajo limpiando casas los fines de semana. Lentamente,
comenzaron a pagar sus deudas, y fueron capaces de refinanciar
el préstamo del automóvil a un interés
más bajo. Muy pronto, esta familia llegó a
estar en situación financiera para comprar su propia
casa.
Hice otra cita para que habláramos con la persona
encargada de préstamos. La solicitud fue aprobada
y Juan y Juanita habían conseguido el sueño
de sus vidas, "ser propietarios de su propia casa".
Me sentí muy orgulloso el día que les entregué
la llave de la casa a esta familia. Pero aun más
orgullosos estaban Juan y Juanita al reflexionar en lo que
habían conseguido con sus propios esfuerzos.
Aprendí que uno puede conseguir lo que quiere si
se fija una meta y sigue los pasos para alcanzarla.
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